C.A. Osasuna Magna y Aspil Vidal Ribera de Navarra firmaron tablas en un apasionante derbi navarro que no defraudó los 2800 espectadores que llenaron el Pabellón Anaitasuna. El conjunto visitante fue por delante en el marcador durante casi todo el encuentro, pero Eseverri empató el partido en el último minuto de encuentro. Con este empate, los de Imanol Arregui se colocan como líderes, a la espera de lo que suceda en los partidos de Movistar Inter y el FC Barcelona Lassa.
La primera ocasión clara del partido la tuvo Sergio G., por parte de la escuadra visitante, pero Asier desbarató la oportunidad, manteniendo el empate a 0 en el marcador. La igualdad fue la protagonista en la primera mitad, hasta que en el minuto 9 Ferran Plana hizo el primero para Aspil Vidal Ribera Navarra, rematando desde el segundo palo tras una buena jugada colectiva. Poco a poco, los de Imanol Arregui fueron haciéndose con el protagonismo en el encuentro, llegando el gol de Araça en el minuto 14, tras una buena triangulación, Precisamente Rafa Usín pudo poner por delante al CA Osasuna Magna desde el doble penalti, pero desperdició la oportunidad. Algo que Iago Rodríguez no hizo, ya que en el minuto 17 volvió a poner por delante a los visitantes con otro lanzamiento desde el doble penalti. En la segunda mitad el asedio de los de Imanol Arregui fue constante, a la vez que infructuoso. Varias fueron las ocasiones claras que tuvieron los locales sobre la meta de Gus, que se empleó a fondo para desbaratarlas. Araça, Eseverri, Rafa Usín y Roberto Martil, no atinaron en situaciones favorables y el empate se resistía.
Cuando restaban cinco minutos para el final del partido Araça se puso la camiseta de portero jugador, empleando el juego de cinco para empatar el encuentro. El cambio táctico surtió efecto, y Eseverri anotó el segundo tanto local en el minuto 37, rematando desde el segundo palo. Pero el partido no terminó ahí, ya que Ferrán Plana adelantó a los visitantes con un tanto a portería vacía. Eseverri empató desde el penalti en el minuto 39, instaurando la locura en Anaitasuna. El resultado ya no se movió, obteniendo un punto que a ambos conjuntos les supo a poco.
