Después del empate a dos goles ante Jimbee Cartagena, el entrenador de Osasuna Magna valoraba la importancia del punto obtenido: «Es un punto importante, tanto a nivel físico del punto como de moral y confianza», afirmaba. A ello Miguel Hernández añadía la buena imagen que el equipo siempre ofrece cuando actúa de local, tarea pendiente a domicilio: «El equipo no nos ha defraudado en casa y ahora a ver si somos capaces de llevarlo a fuera de casa. Se ha visto a un equipo muy competitivo, ante un rival de mucha calidad que te somete y el equipo ha estado sacrificado, muy sólido en defensa».
En cuanto a la evolución del partido, lamentaba que los suyos no hubiesen acertado para poder haber ampliado la renta cuando el Xota se encontraba por delante en el marcador: «En la primera parte hemos salido con más claridad y en la segunda hemos tenido dos o tres mano a mano con el portero. Chemi nos las ha sacado y ellos no han fallado… Al final hemos sacado portero jugador y el equipo ha estado muy bien. Tenemos un punto más, uno menos para llegar a los 30 y un subidón de confianza para el equipo».
Preguntado por la jugada del 1-2, la cual viene precedida por una pérdida en ataque, Miguel lo achacaba a la ambición de los suyos: «Este equipo siempre ha sido valiente y si nos van a pillar que sea por ser valientes y no por echarnos para atrás. Intentaremos corregirlo, que no vuelva a pasar y mejorar lo máximo posible. Son circunstancias que se dan en los partidos. Nosotros también hemos tenido dos mano a mano con el portero. La diferencia está en que ellos no han fallado y nosotros sí… El equipo está muy ambicioso. Hay que sujetarlos muchas veces porque los chavales tienen eso, pero estoy muy contento con ellos y como te digo, vamos a ver si fuera de casa damos otra cara».
