«Estamos muy justos», así comenzaba Miguel Hernández su comparecencia en salta de prensa tras la derrota en Peñíscola. El técnico de Osasuna Magna reconocía que los suyos entraron «muy mal» al partido. «Hemos hecho un partido malo, no hemos entrado en ningún momento y nos ha faltado ponernos, por lo menos, a la altura de intensidad a la que estaba Peñíscola. Un equipo con tanto gol y estando nosotros tan blanditos, es difícil agarrarse al partido», comentaba.
Pese a considera que «no es la mejor manera de despedirnos», también ponía en valor todo lo positivo hecho en la primera vuelta del campeonato, que llevó al equipo a jugar la Copa de España: «Es una temporada que ha tenido muchísimas cosas buenas. El arranque liguero fue muy bueno y fue lo que nos hadado el primer objetivo que es la permanencia. Así entramos en la Copa de España, un torneo siempre bonito y que curte al jugador. Es una inversión de cara al futuro pero hay que seguir aprendiendo porque es una liga muy dura y cuando no te pones al nivel del equipo contrario pueden pasar estas cosas», concluía Miguel Hernández.