Mal partido de Osasuna Magna en su visita al Servigroup Peñíscola, donde los navarros cayeron por 5-2. Fueron dos goles anotados por Ligeiro los que permitieron maquillar un marcador que ya al descanso reflejaba un claro 4-0 a favor de los locales.
Desde un inicio se vio a un Peñíscola mucho más intenso en los duelos, presionaban alto y salían con velocidad en cada transición. Eso propició que el marcador no tardase en verse desnivelado. En el minuto 6 Quintela anotaba el 1-0 en jugada de estrategia. No le daría tiempo a reaccionar al equipo navarro, pues en la siguiente aproximación local, Elías ponía el 2-0 un minuto después.
Los de casa veían todo de cara, mientras que a Osasuna Magna no le salía nada. Pases errados, precipitación y nervios pusieron muy difícil la remontada. Aun así Pachu estuvo cerca de anotar tras finalizar una paralela en la que se quedó sin ángulo de remate. También Josu Mendive y Ion Cerviño rozaron el gol en un robo en pista rival. A los errores en defensa se sumó la falta de acierto en ataque.
Si el partido ya estaba complicado, más lo iba a estar cuando en otra acción de estrategia, cumplido ya el primer cuarto de hora, Plaza establecía el 3-0. Por delante restaban cinco minutos para el descanso y aunque Ligeiro puso en apuros a Gus con un remate exterior, Sancho acabó convirtiendo el 4-0 con un remate junto al poste.
Ya en la segunda parte el Servigroup Peñíscola supo jugar con el marcador. Los locales optaban por esperar a los de Irurtzun y buscar hacer daño a la contra. Dani Saldise tuvo una buena oportunidad para tratar de meter al equipo en el partido, pero tampoco acertó. Se llegaba así al minuto 30, momento en el que los colegiados decidieron expulsar a Asier Llamas. Los jueces interpretaron que el meta navarro había tocado un balón con la mano fuera del área, decisión muy protestada por el cancerbero rojillo. Así, el Xota tuvo que jugar en inferioridad durante dos minutos, tiempo en el que supieron aguantar las intentonas locales. Además, ya con cinco faltas, Alejandro Palazón tuvo el acierto de detener un doble penalti.
Recuperada la igualdad numérica iba a ser Ligeiro el jugador protagonista, en este caso con el 4-1, por medio de una acción personal en la que finalizó con precisión mandando el balón al fondo de la red. Era el minuto 36 y a pesar del gol se antojaba difícil la remontada. Para colmo, ya jugando de cinco, Peñíscola consiguió anotar desde pista propia. Víctor Pérez hizo el 5-1 restando tres minutos para el final. Sería ya a segundos de la bocina cuando Ligeiro mandó un misil al fondo de la red (5-2), tanto con el que concluyó el partido.
Ahora el equipo de Miguel Hernández afrontará una nueva salida, el sábado 26 de octubre en Manzanares.