Sábado 9 de diciembre a las 18:00 horas en Anaitasuna. Llegó el último partido de la primera vuelta y con él la última oportunidad para lograr la clasificación para la Copa de España. Osasuna Magna recibe a un Servigroup Peñíscola sin opciones de acceder entre los ocho primeros, pero que buscará sumar tres puntos que le permitan seguir aspirando a los puesto nobles de la clasificación.
Los de Miguel Hernández necesitan sumar para lograr el objetivo, ya sea los tres puntos o un empate. Incluso, la derrota también les podría valer, aunque para eso sería necesario que Industrias Santa Coloma no lograse puntuar. De ser así, en un hipotético empate entre navarros y catalanes en la clasificación, se debería mirar el golaveraje.
La normativa de la Primera División FS establece que en caso de empate a puntos primero se mire la diferencia de goles general, donde Osasuna Magna tiene un +2 y el Industrias Santa Coloma tiene un +1. De igualarse este indicador se miraría entonces a los goles anotados a favor, donde el CD Xota tiene 36 por 49 de los catalanes.
Un premio al trabajo de los últimos años.
Miguel Hernández afronta el duelo sabiendo que va a ser «un partido bonito de jugar, de ir al pabellón, de apretarse y que tiene un premio muy bonito para el grupo», afirma. El preparador de Xota es contundente en su apuesta para el sábado: «Vamos a darlo todo por poder estar en la Copa. El equipo se ha ganado poder disputar un partido así».
Preguntado por el rival, explica que «Peñíscola tiene un grupo ya hecho desde hace unas cuantas temporadas, se conocen mucho, tienen de todo, pivots fuertes y de calidad, alas de calidad, tienen también la subida del portero y es un equipo que está muy bien conjuntado. Nos van a crear muchas dificultades», comenta. A pesar de ello, insiste en el premio que puede obtener ya no solo el grupo de jugadores, sino también el club, que no ha logrado disputar las dos últimas ediciones de la Copa de España. «Poder lograr la clasificación es una recompensa para todos, para el grupo, para el club y para la afición. Es para sentirse orgulloso, ganar autoestima y sentirse identificados con el equipo. Vamos a hacer lo que venimos haciendo hasta ahora, que es pelear, ser el Xota y llevarnos los puntos. Queremos ver los frutos de estos últimos años, que han sido de gestión, de crear un equipo y es un premio a la labor de estos últimos años».
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El chef Aaron Ortiz realizará el saque de honor en el partido ante Peñíscola
