Osasuna Magna Xota y Amixalan Anaitasuna han alcanzado un acuerdo para trabajar conjuntamente ambos clubes durante la temporada 2023-2024. Así Anaitasuna FS y el CD Xota firman un contrato de filialidad por el que los jugadores de la cantera de Irurtzun con mayor potencial pasan a jugar en el primer equipo del club del barrio de San Juan, que milita actualmente en la Segunda B.
Para David Razquin, coordinador de fútbol sala en la S.C.D.R. Anaitasuna, este acuerdo supone la llegada de «muchos jugadores de calidad y con talento, que permiten al club dar un salto de calidad», afirma. «Son jugadores jóvenes que vienen a aportar su granito de arena y que van a ayudar a que el club esté lo más arriba posible, tanto en la Segunda B como en el resto de categorías inferiores», añade.
Por su parte, Igor Echarri será la persona del CD Xota que trabaje en el Segunda B de Amixalan Anaitasuna, ejerciendo como segundo entrenador del equipo y con José Bandera a la cabeza. «Cuando recibí la llamada no me lo pensé dos veces. Todo lo que se refiere a objetivos y planificación del club es un reto muy importante para mi, algo que me va a exigir mucho pero de lo que tengo muchas ganas», explica.
En Anaitasuna todo son buenas palabras para la familia del CD Xota, institución que tiene su sede en la propia instalación y que tras varios años jugando en ‘La Catedral’ ven ahora cómo ambos clubes terminan por unir sus proyectos. «Son muchos años juntos, ellos son buena gente y muchos de los que estamos en Anaita hemos compartido vestuario y hemos estado allí en Irurtzun. Los caminos se tenían que juntar y el acuerdo creo que va a ser bueno para ambos clubes. Ojalá sea para muchos años», dice David Razquin.
Mismo parecer tiene Igor Echarri, que destaca lo importante que es para los canteranos de Osasuna Magna que habitualmente entrenan con el equipo profesional, poder hacerlo al tiempo que cada fin de semana se curten en una categoría como la Segunda B. «Una fidelidad con un club como Anaitasuna es algo muy bonito y sobre todo por los chavales, que tengan esa disponibilidad de poder entrenar con el primer equipo y competir al mismo tiempo en una categoría tan exigente como es la Segunda B. Eso es algo que les va a hacer crecer y entre todos esperamos que vaya todo muy bien».
El Segunda B de Anaitasuna todavía está en pretemporada y en él compiten jugadores que ya saben lo qué es defender los colores de Osasuna Magna. Ese es el caso de Javi Saldise, hermano de Dani Saldise. Ambos vuelven a compartir pabellón, aunque con camisetas diferentes, pero bajo un mismo proyecto que busca consolidar el fútbol sala de base.