Miguel Hernández valoró la victoria en Peñíscola por 2-3. El técnico navarro acabó con buenas sensaciones el segundo test de pretemporada que, como se buscaba, era una exigente prueba para Osasuna Magna.
«Peñíscola tiene un equipo potente, encima en su casa… Tienen mucho juego de pivot, nos han hecho mucho daño, nos hemos cargado muy rápidamente de faltas y eso nos ha condicionado un poco, pero he visto lo que estaba buscando en estos partidos, que es que el equipo se agarrase al partido. Hemos tenido que trabajar mucho en defensa. Va a haber momentos para todo y sobre todo hay que saber competir. Hoy lo hemos hecho en un lugar difícil de jugar», explicaba a preguntas del club.
A ello añadía el hambre de fútbol sala que se respira en el equipo y cómo el de Peñíscola era un duelo difícil por el juego de pivot que acostumbra el rival: «La gente está con muchas ganas. Todo el mundo se quiere probar y eso está bien… Peñíscola es un equipo que tiene unos pivots muy fuertes y muy buenos. Lo saben jugar muy bien, están en su casa, te aprietan mucho… Nos hemos cargado enseguida de faltas, llevamos dos partidos en cuatro días, hoy hace mucho calor aquí… A la gente le estaba costando», explicaba,
Por último hablaba sobre la faceta goleadora hasta el momento, donde el equipo encadena dos partidos anotando tres goles a favor: «Es importante que tengamos gol y tres goles te hacen estar en el partido. El equipo ha defendido muy bien, muy duro. Todavía hay muchísimas cosas que mejorar pero hay tiempo y hay ganas de hacer».